El escritor Juan Manuel Jiménez Muñoz, ha sido todo un reciente descubrimiento para mí.
Nacido en Málaga, en 1961, ejerce como médico especialista en Medicina Familiar desde 1985. Actualmente trabaja en el Centro de Salud "Portada Alta", del barrio malagueño del mismo nombre.
Es muy activo en las redes sociales, escribiendo artículos muy agudos e incisivos que tocan diversos temas actuales, que si bien por un lado le han hecho muy popular, también le han granjeado adversarios y antagonistas. No se muerde la lengua, usa las teclas del ordenador con gran soltura y fluidez, a veces, entra a matar, usando el teclado a modo de estoque, y desde mi punto de vista, con un lenguaje preciso, claro, equilibrado y ecuánime no exento de dureza inmisericorde. Y eso, en este tiempo zafio y falto de base en todos los sentidos, no se perdona y crea enemigos, claro que sí.
Aparte de todo lo dicho anteriormente, hay que decir que ha escrito multitud de artículos, pero sobre todo y es por lo que personalmente he llegado a conocerlo, ha publicado dos novelas históricas que me han encantado. Subrayo y resalto lo de históricas, porque considero que son magistrales para conocer y entender la Historia Contemporánea de España.
Resulta que cuando yo estudiaba historia, ha llovido ya desde entonces, los libros eran una secuencia ordenada e infinita de sucesos y fechas que había simplemente que memorizar para aprobar. Más adelante, y en la misma línea, en los colegios e institutos, se enseñaba Historia de España o del Mundo o de las Civilizaciones, y mire usted por donde nunca daba tiempo a tratar los últimos temas del libro, con lo que la llamada Historia Contemporánea (desde la Revolución Francesa -1789- hasta nuestros días) se comentaba de prisa y corriendo o sencillamente no se mencionaba si quiera. Insisto, solamente se trataba de conocer sucesos y fechas, nada más.
De los modos en que vivía la gente, se ofrecía "cero patatero". Eso dependía del maestro o profesor de turno, que algunos había que se esforzaban en contarlo en clases magistrales, dentro de lo que podían y las circunstancias le dejaban.
No digamos nada de "estudiar" la época de la Dictadura de Franco, nada de nada, salvo los que tuvimos que estudiar a la fuerza los "gloriosos" principios del Movimiento Nacional en aquellas asignaturas expresamente creadas para adoctrinar: FEN: Formación del Espíritu Nacional. En fin, el tiempo ha pasado y sucede, lo que en algún otro sitio cuenta Juan Manuel Jiménez Muñoz con una base lógica y totalmente matemática:
"Hoy, en 2022, nadie menor de 110 años de edad pudo ostentar el grado de oficial durante nuestra guerra incivil. Nadie menor de 105 años pudo ser suboficial. Nadie menor de 100 años pudo ser soldado raso. Y nadie menor de 60 años puede tener recuerdos personales del dictador Francisco Franco, el vencedor de aquella contienda, que falleció en su cama en 1975."
Leer el articulito completo al respecto aquí>>>
Y sin más preámbulos, animo a la la lectura de esas dos novelas que tratan sobre la vida de los antepasados de Juan Manuel en un pueblo de la Axarquía malagueña, Canillas de Aceituno, de tal forma redactadas que, conociendo los avatares de sus gentes, se puede llegar a conocer y valorar el modo de vida de los españoles de entonces, todo debidamente fundamentado y justificado con un abundante surtido de documentos personales y bibliografía que dan base y soporte a lo que en ellas, después de la investigación, se describe.
Me atrevo a proponer algo, que sé de antemano que no va a ir a ninguna parte, pero bueno, al menos le queda a uno el gustito de manifestarse y que es que, en los institutos andaluces, se use el contenido de ambas novelas para estudiar Historia Contemporánea y Lengua Española a la vez, teniendo como base el contenido desarrollado en dichos libros:
- "Sangre de Sierras Bravas" editado en 2019, trata sobre los años que van de 1808 a 1875.
- "La flor de los celindos" editado en 2017, trata sobre los años que van de 1875 a 1975.
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