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Los blogs han irrumpido en todo el mundo internáutico y el porche como no podía ser menos se pone en primera línea y no quiere quedarse atrás.
Este blog permite que el porche sea más participativo, un sitio en el que sea más fácil opinar, dejar un comentario o pegar aquello que simplemente se quiere compartir con los demás, con el único fin de mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo y de sus gentes.
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Sin raíces no hay ramas, sin árboles no hay bosque.
¡Abajo las raíces, arriba las ramas!
Ubuntu.

Salu2 cordiales y pedal-pedal.
"Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo." EDUARDO GALEANO.

"Cualquier objeto, por insignificante que parezca, tiene una historia que contar. Un mago o maga de las palabras solamente tiene que saber imaginarla y luego, contarla." AYES & LUIS

13 septiembre, 2018

Mi Camino hacia mi Ítaca, mi Ítaca en mi Camino.


Hace mucho ya que leí "La Odisea", la del inmortal Homero. Si encuentro el momento y el hueco apropiado debería releerla. Pero hay tanto nuevo que leer que sé que no me va a dar tiempo. De todas formas, "que me quiten lo bailao" que diría el castizo.

La cuestión es que me ha llegado esto y lo he leído y releído con sumo gusto ya que, la verdad, es que ahora que estoy a las puertas de emprender un nuevo Camino, se siente y comprende de otro modo.


Cuando emprendas tu viaje a Ítaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios.

Ten siempre a Ítaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguantar a que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Ítaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Ítacas.

P. Kavafis. Antología poética.
Alianza Editorial, Madrid 1999.
Edición y traducción: Pedro Bádenas de la Peña

Sabios consejos encierra el poema para el peregrino-caminante.


Todo esto y mucho más puede encontrarse dentro del interesante artículo de Arístides Mínguez Baños, "Mis Ítacas: Cartagena (1)", cuyo enlace os pego a continuación https://www.zendalibros.com/mis-itacas-i-cartagena-1/ y que entre otras cosas dice algo tan sabroso como:

"Ítaca se ha trocado en una metáfora de vida, en esa patria, no sólo física, sino también espiritual, a la que todos soñamos con tornar, esa conjunción de espacio, tiempo y personas en la que nos hemos visto plenamente realizados. Ítaca no ha de ser sólo un espacio geográfico, sino, ¿por qué no?, un paisaje, un cuadro, un libro o una canción, que han esculpido su impronta en nuestra ánima y a los que invocamos cuando sentimos haber perdido el rumbo o tan sólo queremos paladearlos en nuestros instantes de recogimiento."

Y entonces es cuando se me ha venido a la mente mi piedra-mirador, una de "mis Ítacas" particulares, a la que me apresto a retornar, cada vez que me realiza su llamada, para volver a situarme y marcarme el rumbo probablemente perdido o a punto de hacerlo. 

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