Hoy me ha llegado por las redes un poema de PABLO NERUDA, incluído en su obra "Jardines de invierno", que me ha impactado el alma y me ha llenado de profundos sentimientos.
Aquí lo dejo, para tenerlo a mano y poder disfrutarlo cuando me apetezca:
Mi perro me miraba,
con esos ojos más puros que los míos,
perdía el tiempo pero me miraba,
con la mirada que me reservó,
toda su dulce, peluda vida,
cerca de mí,
sin molestarme nunca,
ni pedirme nada.
1 comentario:
Cuando leí la entrada del Blog de mi amigo Luís, "Mi perro me miraba", donde transcribe un fragmento del texto del poema de Pablo Neruda (1.904 - 1.973, Premio Nobel de Literatura 1.971), "Un perro ha muerto", que escribió en México, en su finca de Michoacán y se publicó en su obra póstuma, "Jardín de Invierno" (1.974) y en el que refleja su experiencia personal con sus perros "Calbuco", "Cutaca", "Nyon", "Chu Tuh", "Donegal", "Panda", "Niebla"... me emocioné… pensando en las vivencias con mis perros/as (“Lobo”, “Odín”, “Lucky”, “Loki”, “Laika”, “Talos”, “Crom”, “Freya”, “Gea”, “Titán”...) e, inmediatamente, quise compartir con mis amistades, ese precioso poema… al poco, recibí la respuesta de mi amigo (FPM), en la que me "acompaña en el sentimiento"... y que literalmente, dice: "No hay nada más auténtico, entregado y desinteresado que la fidelidad de un perro a su dueño. Y más intrigante que su mirada. Parecen decir tantas cosas… Cuando se van, dejan un gran vacío. Yo ya he perdido a tres y se pasa muy mal. Si asistes, como he asistido yo al momento final, es tremendo: te miran y te miran con una mirada dulce y triste que es difícil de olvidar". Muchas gracias, de corazón, a todos los fieles y nobles perros… Antonio Gómez Romera.-
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